Voces que transforman

¿De dónde viene la barra de chocolate que comemos, el açaí, la leche de almendras y demás productos saludables que están
de moda?
Algunos alimentos, que parecen nuevos, son cultivados aquí (latinoamérica) y están siendo promovidos por una nueva generación que busca alimentarse diferente, con conciencia frente al medio ambiente y al comercio justo.

Nos mueven las historias que van más allá de un producto, que tienen una filosofía de vida y de trabajo sólida. En este caso, Carlos y Fernando, de Aso Herbal, apuestan por crear nuevas formas de ingreso, hacer una transición a la agricultura ecológica y empoderar a los campesinos.

Juanchoconat nació de un árbol de cacao y de las historias que Juan y Natalia, socios y creadores de la marca, encontraron alrededor de los campesinos cacaoteros de Colombia. Historias y sabores que hoy están construyendo país.

Cuando de impacto se trata, no hay cadenas que detengan el propósito y las ganas de transformar sociedades. En la cárcel de Yarumal, Antioquia, se confeccionan las prendas que usamos miles de Colombianos, prendas hechas de las manos de los protagonistas de un ecosistema diseñado para el crecimiento personal y profesional de decenas de privados de la libertad que encuentran nuevas oportunidades en la confección y la producción de textiles para Colombia.

Hasta en las industrias más tradicionales la innovación, el empuje y el talento Colombiano siempre consiguen transformar paradigmas. Esta es la historia de como un equipo ha conseguido transformar la cultura de una empresa, la industria en una región y la manera de hacer textiles desde Colombia para el mundo entero.

Un hecho terrible hizo que Wilson Camargo saliera de su ciudad natal, Duitama, y se encontrara con la empresa Hortifresco en Zipaquirá. ¿Por qué esta empresa cambió su vida y le dio la oportunidad de empezar de nuevo? Junto a Iván Arenas padre e Iván Arenas hijo, quienes hacen parte de la familia fundadora de la empresa, los tres nos cuentan sobre la importancia de generar un fuerte sentido de pertenencia en las empresas rurales.

¿Qué se necesita para impactar la vida de las mujeres rurales en Colombia? Ginna Jiménez, con tan solo 15 años, decidió descubrirlo por su cuenta. Junto a su mamá y su hermano fundó Comproagro, una plataforma que elimina a la mayoría de los intermediarios entre los campesinos y sus compradores finales. Pero, además, gracias a su centro de acopio en Toca (Boyacá) cambió la realidad de decenas de mujeres del municipio y de agricultores en diferentes regiones del país. ¿Cómo lo logró?